Llegado a cierto momento, siempre me gustó (de echo lo hice en el blog alguna vez), pararme, echar la vista atrás y pensar un momento sobre que gente estuvo ahí siempre, me apoyó, ayudó, y de alguna manera reconocerlo y agradecerselo públicamente, me parece un ejercicio inmensamente sano y que me aporta muchísima paz.
Siempre se tendrá que empezar por la familia, por lo que estuvieron desde un principio, desde que uno es pequeño, que aunque no lo creaís (los que me conoceís) hubo una vez, que yo fuí pequeño :)
Siempre tuve la suerte de tener unos padres comprensivos y que me permitieron trazar mi propia línea, nunca exenta, esa línea, de choques y de discusiones, pero si no fuera así, no seríamos una verdadera familia, ¿no?
Gracias a mi madre porque siempre apoyó los nuevos proyectos y me animanó a buscar nuevos objetivos.
Gracias a mi padre porque me enseñó lo que "ye trabayar", algo que no tiene precio y también por encapricharse de aquella Canon eos3000, que nunca usó y que fué lo que me metió a mi en todo esto.
Gracias a mi abuelo materno que me inculcó el amor por esta región, Asturies, que aún siendo yo bebé, ya me había llevado de visita a multitud de puertos de montaña, de nuestra tierra y que nunca dejó de ser un apoyo indispensable para mí.
Gracias a mi abuela materna que permitió, auspició y secundó todas las escapadas que mi abuelo y yo, nos pegabamos a lo largo de muchos años, sin su comprensión no habría podido ser todo lo que aprendí de mi tierra.
Gracias a mi abuelo paterno que me enseñó lo que es trabajar en el pueblo, lo que son las costumbres y las tradiciones de esta pequeña Asturies, un paisano de los de antes, un ejemplo.
Gracias a mi abuela paterna que se podría decir que "nunca apagó el fuego de la cocina" siempre dispuesta a preparar una buena comida a cualquier hora, a explicarte alguna costumbre tradicional, a comprender los enfados, en fin, otra "muyer" de las de antes, de pueblu y por ende, con verdaderos valores.
No podría seguir con estos agradecimientos sin pasar por alguién que ya lleva unos cuantos años en "mi familia" y no es otra que mi novia, comprensiva, paciente, razonable con todas mi escapadas, con todas mi "invitaciones voluntarias" para ir conmigo a rutas, de todas mis horas de playa, de todas mis sesiones de olas; sinceramente creo que tiene el cielo ganado pero sé que me entiende a la perfección y sabe, mejor que nadie, esta afición que me apasiona.
¿Y como podría olvidar a un cabezon llavariegu? que nunca falla, que siempre está ahí para escaparse al monte, que tantas veces llevó la comida, que tantas veces nos perdió (jaja sí, sí) y que sin más que un simple y esceuto mensaje de "mañana al monte", ya está listo, sin pedir más explicaciones, ni poner condiciones.
Depués como dejar pasar a dos que comparten el mismo nombre y la misma pasión: el mar; que tanto me enseñaron, me enseñan y me enseñaran. Uno de puerto pesquero y el otro de casa de monte, pero ambos dos apoyos perfectos en años de andadura por el mar y todo lo que en él se desarrolla: deportes, vida, condiciones, etc.
No hay que olvidar a amigos de los que tienes la impresión que siempre estuvieron ahí, primero compañeros de pista de atletismo y entrenamientos; y depués paciente con todos los proyectos, de fotos en los que me meto, ya que como es propietario de una empresa de impresión y por tanto está "obligado por ley" a aguantarme (o mejor dicho, será por amistad).
Que decir de todos los amigos, amigos de los de toda la vida, de los que conoces desde parvulos, de los que se saben mi nombre compuesto, de esos que muchas veces tuvieron que pasar sin contar conmigo ya que yo estaba en el monte o había buenas olas o siemplemente buenas previsiones para ello.
También agradecer a dos personajes con los que he profundizado en el mundo la imagen, que perdieron su tiempo para explicarme un poco de los fundamentos básicos de la edición en fotografía y que sobre todo supieron torear mis prontos (aunque al final llevara yo la razón jeje) y que me guiaron en lo que puede ser un bonito proyecto de futuro encabezado por tres siglas capicúa.
Gracias, debo a dos foros, uno de naturaleza exclusivamente y otro más general (este último marca regional, hay que decirlo), que de una manera u otra, sirvieron de motivación y de profesor durante unos cuantos años, con sus buenos y sus malos momentos, con su buena gente y con sus cabrones, pero que realmente son como la vida misma, un poco de todo y empujandote a avanzar... y aquí no quiero dejar de mentar, al grupo de buena gente que conocí en estos (ciber) lugares y que después de los años seguimos manteniendo relación, bien sea personal o por la red.
Tantas veces piensas que el mundo está completamente lleno de gente indeseable pero, la verdad, lo tengo que decir, después de escribir estas líneas tan necesarias, bien parece que al final, tuve la suerte de encontrar a muchas y muy buenas personas.
Sin más, enviar desde aquí mi más efusivo agradecimiento a tod@s y expresar mi intención de no defraudarlos nunca, un abrazo.. Toral.